Ideario

PRESENTACIÓN


Nuestros Colegios pertenecen al Instituto de las Hermanas Terciarias Franciscanas de la Caridad, religiosas dedicadas entre otros apostolados a la educación de los niños y los jóvenes.

El Instituto fue fundado por una humilde religiosa franciscana, sor Mercedes Guerra en el año 1.880, a quien Dios le hizo descubrir la necesidad e importancia de instruir y educar a los hijos de los hogares más humildes, como también a huérfanos y abandonados. Fieles al carisma de nuestra fundadora, continuamos ofreciendo una educación popular, básica, no elitista, abierta y cristiana que expresamos en este documento.

La nueva Ley Federal de Educación que se va aplicar en los colegios, confirma a la familia como agente natural y primario de la educación y garantiza el derecho de los padres a elegir el tipo de educación que consideren mejor para sus hijos.

En este documento que ofrecemos, intentamos trazar pautas fundamentales para educar seriamente a los niños y niñas que sus padres nos confían, dentro de las líneas aquí expresadas, unidas a otros muchos colaboradores y colaboradoras que trabajan junto a nosotras en esta tarea educativa.

Gloría a Dios, Señor Dios único, el que hace maravillas.


Buenos Aires, marzo de 1.996.



Entidad Titular

1.- La Entidad Titular de nuestros Colegios Franciscanos, sito en Olleros 2080, de la Capital Federal, es el Instituto de las Hermanas Terciarias Franciscanas de la Caridad en la República Argentina.

Nuestro Ideario

2.- En ejercicio del derecho reconocido por la legislación argentina, dicha entidad Titular establece el documento que determina Nuestro Ideario Educativo y lo ofrece a la sociedad argentina. Con él expresa su identidad dentro del conjunto de las instituciones educativas.

Centro de la Iglesia Católica

3.- Para llevar a cabo nuestra misión, que pretende la plena realización del hombre como persona y como hijo de Dios, nos inspiramos en la dignidad de la persona, en los derechos humanos, en los avances científico - culturales de la sociedad, en el espíritu del Evangelio y las orientaciones de la Iglesia Católica y de la espiritualidad franciscana. 

Personalizar al hombre

Por ello consideramos que el objetivo de toda educación genuina es el de humanizar y personalizar al hombre, sin desviarlo, antes bien orientándolo eficazmente hacia su fin último y trasciende su finitud esencial.

Una sociedad más justa

4.- Ofrecemos a la sociedad argentina, al margen de todo afán lucrativo, nuestro esfuerzo para construir una sociedad más justa, libre y organizada, que supere las fracturas internas, las distancias y diferencias estridentes entre unos grupos privilegiados y otros injustamente marginados.

Rasgos Franciscanos

5.- Seguimos la línea establecida ya en 1.880 por nuestra Fundadora, Madre Mercedes Guerra, que supo acomodar los contenidos de la fe eclesial al lenguaje coloquial y comprensible de los jóvenes y del mismo pueblo.

La educación, elemento transformador

Valorar la educación como elemento transformador de la sociedad, que justifica y motiva nuestra actual dedicación.

No hacer discriminación alguna entre alumnos por su posición social, económica, creencias religiosas, ideales políticos o aptitudes intelectuales.

No hacer discriminaciones

Dedicamos especialmente a los más sencillos y necesitados, para que accedan a la cultura, no como lujo sino como instrumento de promoción humana y de liberación, como ya se estableció en 1,880, cuando fueron creadas las primeras escuelas de nuestra institución.

Dedicación a los más necesitados

Utilizar métodos didácticos sencillos, eficaces y breves. Educar en la fe y en la cultura.

La constante reevangelización

6.- Integrarnos al proceso social latinoamericano, impregnado por una cultura radicalmente cristiana, en la cual, sin embargo, coexisten valores y antivalores, luces y sombras, y por lo tanto necesita ser constantemente reevangelizada.

7.- No imponemos a nadie la línea educativa que se expresa en este documento. Pero la consecución de sus objetivos educativos exige que los padres de alumnos y profesores, y en general, todos los miembros de la Comunidad Educativa, lo acepten o al menos lo respeten.



La luz de Jesús sobre el hombre revela el misterio del hombre

8.- Como cristianos, creemos que el acontecimiento principal de la historia y del hombre sobre la tierra es la venida de Jesucristo. Para nosotros, educadores cristianos, Jesucristo ilumina y enriquece las diversas concepciones del hombre con una perspectiva original y nueva sobre su origen y destino, su dignidad, su misión en la familia, en el trabajo y en la sociedad. Jesús revela al hombre el misterio del hombre y le dice que es hijo de Dios y hermano de todos los hombres.

Acompañarlo en su educación integral

9.- Nuestra labor educativa consiste en ayudar y acompañar al alumno en el descubrimiento y potenciación de los factores y energías que constituyen su personalidad, según las diversas etapas evolutivas del proceso educativo. Dentro de esta educación integral acentuamos los siguientes aspectos:

a. El desarrollo armónico de sus posibilidades psicofísicas, intelectuales y afectivas.

b. La potenciación de la dimensión social y la inserción en los diversos grupos sociales.

c. El desarrollo de la dimensión ética, trascendente y religiosa.



La espiritualidad franciscana

10. De la espiritualidad franciscana, nace una concepción del hombre. Consideramos al hombre como ser creado a imagen y semejanza de Dios que "en la unidad de su ser, a la vez corpórea y espiritual, se presenta capaz de conocer, amar y obrar libremente".

En Jesucristo hemos descubierto la imagen del hombre nuevo (Col.3,10) que es persona humana, desde el mismo momento de su concepción, abierta desde entonces a la trascendencia.

Artífice de su propio destino

Por ser el hombre alguien llamado a elegir un proyecto de vida en conformidad con su propio ser, es artífice de su propio destino.

Siguiendo el ideal de San Francisco de Asís, buscamos la realización personal de cada hombre en el logro de su armonía interior, formándolo en orden último fin y capacitándolo para vivir la auténtica triple dimensión de:


4. Valores y actitudes que potenciamos


Responsabilidad

11.- Educamos en la responsabilidad personal, el sentido del deber y el respeto a todos los hombres por encima de cualquier ideología.

El trabajo dignifica

12.- El trabajo, que es un derecho y un deber del hombre, le dignifica en la comunidad humana. Hecho con responsabilidad y amor, ennoblece a la persona, a la vez que es una obligación de justicia para con la sociedad y una colaboración en la obra creadora de Dios.

En y para la libertad

13.- Creemos necesaria una educación en y para la libertad. Tratamos de desarrollar en el alumno su iniciativa y creatividad personales, así como la formación de criterios para la vida, en un mundo en continuo cambio. Consideramos que educar es una ardua tarea para ayudar al hombre a superar sus esclavitudes y sus miedos a la libertad.

Sentido crítico, diálogo

14.- Les ayudamos a desarrollar el sentido crítico, las cualidades para la convivencia y la participación, y la capacidad para  el diálogo y la integración en los diversos grupos de la sociedad.

Solidaridad, paz y justicia

15.- Procuramos lograr una formación progresiva en los valores de igualdad, solidaridad y paz entre los hombres, de forma que le capacite a un ulterior compromiso sociopolítico por un mundo más justo, según las diferentes y legítimas opciones.

Madurar en la fe

16.- Consideramos labor fundamental ayudarles a madurar en la fe, a capacitarlos para asumir el protagonismo de los cambios necesarios y afianzar en la vida la fidelidad a la verdad y a la justicia para lograr una mejor convivencia en el amor y la paz, de manera que puedan llegar a una libre opción cristiana y a comprometerse, como cristianos responsables, en la construcción de un mundo más humano y fraterno, manteniendo un estilo de vida que sea coherente con su fe.

El sentido de Dios

17.- Nos esforzamos en suscitar el sentido de Dios que se manifiesta en la Naturaleza, en ciertos acontecimientos y en las distintas culturas, técnicas y movimientos.

Construir un mundo fraterno

18.- Intentamos que se sientan interpelados por Dios, que les llama con fuerza a la construcción de una auténtica fraternidad en el mundo, aprendiendo a superar fracasos, barreras e incomprensiones, por la luz y la alegría que infunde la esperanza y la utopía cristiana de la nueva comunidad humana que ya ha comenzado. Consideramos que educar es crear comunidad.

En medio del individualismo, materialismo y exitismo inmediato que tanto caracteriza al mundo de hoy, rescatamos el sentido social, ético y trascendente.

Dimensión apostólica

19.- Tratamos de despertar y cultivar el sentido apostólico, misional y ecuménico con experiencias cristianas y actividades juveniles en grupo.

Reflexión

20.- Intentamos crear un ambiente favorable a la escucha, la reflexión, el silencio y la interiorización.



Agente de su propio conocimiento

21.- Ayudamos y estimulamos al alumno para que sea él mismo el principal agente de su propio crecimiento, en medio de una comunidad y en relación con todas las realidades que le circundan. Consideramos la motivación en el alumno un factor decisivo en el aprendizaje; le acompañamos en su progresivo descubrimiento e interiorización.

Pedagogía personalizada, activa. Técnicas de trabajo

22.- Seguimos una pedagogía personalizada que tiene en cuenta a cada alumno como es, y una pedagogía activa que fomenta la creatividad y la búsqueda personal de las verdades y certezas. Enseñamos al alumno adecuadas técnicas de trabajo y estudio, de manera que pueda continuar su aprendizaje a lo largo de su vida. Procuramos conjugar equilibradamente el trabajo teórico, manual y técnico.

Análisis y critica

23.- Ejercitamos al alumno en análisis y critica de los contenidos, capacitándolo para el discernimiento, las convicciones y la toma de decisiones.

Actividades deportivas y culturales. 

24.- Valoramos como medio excelente de formación todas las actividades deportivas y culturales, tengan carácter escolar o extraescolar.

Actualización del saber

25.- Suscitamos una actitud dinámica, abierta a la necesidad de una continua actualización del saber, preparando para la evolución y el cambio como constantes de la vida en todos sus aspectos.

Trabajo en grupo

26.- Enseñamos a trabajar en grupo, en colaboración con otros, de forma coordinada.

Trato amistoso

27.- Tratamos a los alumnos con espíritu de servicio, en relación de amistad, con la autoridad nacida de la propia competencia y entrega.

Consideramos que al alumno debe dársele seguridad, afecto, reconocimiento, posibilidad de crecimiento y realización, pero sobre todo, debe dársele orientación y sentido de la vida.

Que el alumno se sienta feliz y seguro

28.- Buscamos que el alumno se sienta feliz y seguro en su trabajo, en las relaciones con los profesores y compañeros, en todas las actividades que constituyen la vida del Colegio.

Catequesis progresiva

29.- Consideramos fundamental para la educación en la fe la catequesis progresiva de la Palabra de Dios, acomodada a cada edad, que lleva al descubrimiento de Jesús y a su seguimiento e imitación. Esto nos mueve a una continua renovación en los métodos pastorales y catequéticos.

Palabras de Dios oración, Eucaristía

30.- La reflexión común y frecuente de la Palabra de Dios hecha con sencillez y fe auténtica, puede renovar en educadores y alumnos el hecho y el mensaje de salvación. Por consiguiente, fomentamos, dentro de la libertad personal, la práctica de la oración y la vida sacramental mediante la celebración gozosa de la fe, principalmente en la Eucaristía.

María, testimonio vivo

31.- María, Madre y educadora de Jesús, ilumina fuertemente nuestra búsqueda de Jesús con su testimonio de fe y entrega. Su imitación y devoción nos conduce plenamente a su Hijo. Continuamos así la fuerte impronta mariana que la Madre Mercedes Guerra infundió a su obra.

Enseñanza religiosa

32.- La enseñanza religiosa escolar forma parte de la educación en la fe y de su oferta. Será impartida con la mayor calidad posible dentro del horario escolar. La organización y dirección de la pastoral pertenece a la propia identidad del Colegio.

Proyecto educativo

33.- Tenemos un Proyecto Educativo, elaborado por la propia Comunidad Educativa del Colegio, que concreta la aplicación gradual y progresiva de esta propuesta de formación integral, según los diversos niveles escolares.

Colaboración de todos

34.- Medio fundamental para la realización de este proyecto es la estrecha colaboración de cuantos componen la Comunidad Educativa del Colegio.



Humanizar y personalizar

35.- La educación franciscana tiene por objetivo humanizar y personalizar al hombre, orientándolo hacia la verdad, el amor y a Dios como Sumo Bien.

El amor, no sólo necesario

36.- El elemento característico de la figura magistral y de la obra educativa de San Francisco de Asís es el Amor, entendido no sólo como algo necesario, sino fundamental. 

La formación franciscana

37.- El modo franciscano de formar, puede ser caracterizado como intuitivo, con un amplio margen para la experiencia y la afectividad. Comprende tres etapas:


Primacía del Evangelio

38.- Nuestros Colegios deben distinguirse por la especial primacía del Evangelio, que transforma las relaciones personales y pone como única base el Amor.

Espiritualidad  franciscana

39.- Las notas de la espiritualidad franciscana constituyen el distintivo de nuestras comunidades educativas, que quieren ser canales del amor con que Dios llama a su encuentro y abre al hombre a los hermanos y a la creación. 

Clima de caridad 

40.- En el clima de la caridad, apertura, participación y solidaridad, educamos en un proceso de continua conversión, para configurar la vida con Cristo Jesús.

María, madre y modelo

41.- Presentamos a la Santísima Virgen como Madre y Modelo fomentando un tierno amor filial y la imitación de sus virtudes.

Espíritu de sencillez, entrega y servicio

42.- Con espíritu de sencillez, entrega, servicio y amor a la oración y al trabajo, procuramos responder a las necesidades de cada época.

43.- En búsqueda de una educación que mejora día a día su calidad, adoptamos las innovaciones pedagógicas, cuya fundamentación teórica y su práctica sean coherentes con los principios evangélicos.


 

Quiénes la constituyen

44.- Dado que la educación es esencialmente labor de conjunto, los principales implicados en ella - padres, alumnos, profesores, personal administrativo y de servicio, y la Entidad Titular - constituyen una Comunidad Educativa que asume las diferentes responsabilidades para llevar a cabo su misión educadora.

Principios de la participación

45.- Los principios que ayudan a determinar estos ámbitos y niveles de participación son los siguientes: funcionalidad, corresponsabilidad, subsidiariedad, representatividad y globalidad. 

Programación y realización del proyecto

46.- Los miembros de la Comunidad Educactiva participan, con las funciones propias de cada grupo, en la reflexión, programación y realización del proyecto de educación. Esta participación debe ser activa y responsable, esto es, que lleve al compromiso de actuar y asumir las responsabilidades que emanan de la misma.

Funciones y cauces de participación

47.- La regulación de las funciones y cauces de participación de cada estamento, así como de los órganos de gobierno y de los educativos, se concretan en el Reglamento de Régimen Interior del Colegio.

Ser comunidad cristiana

48.- Aspiramos a que la Comunidad Educativa llegue a constituirse, en la medida de lo posible, en comunidad cristiana. 

49.- La Comunidad Educativa del Colegio elabora el Proyecto Educativo, en conformidad con Nuestro Ideario Educativo, así como la Programación concreta para cada curso.

Cooperadores de la verdad y verdadero apostolado

50.- Anualmente la Comunidad Educativa revisa dicho Proyecto y evalúa los medios empleados y los resultados obtenidos.


 

51.- Acompañar al niño en la búsqueda de la verdad humana, científica y trascendente es la tarea más noble del educador. Del educador depende fundamentalmente la realización del proyecto de educación.  Su trabajo, como gran servicio a la humanidad, es un verdadero apostolado por el que los educadores participan de la misión de la iglesia.  

Libertad de cátedra

52.- El derecho al ejercicio de la libertad de cátedra se desarrollará, según se reconoce la ley, dentro de los límites propios del puesto docente que se ocupan y que vienen dados por el nivel educativo en que se imparte la docencia y por Nuestro Ideario Educativo.

Situación socio - económica

53.- Trabajamos con todo empeño para que la situación socioeconómica de los docentes esté a la altura que la noble tarea de la educación merece. 

Seglares en órganos de dirección

54.- Los educadores seglares debidamente identificados con los objetivos propios de la Institución, son animados a participar en órganos gestores y de dirección pedagógica, técnica, administrativa, etc., de acuerdo con sus valores personales.

Testimonio de vida cristiana

55.- El personal docente de esta Comunidad Educativa, consciente de que no hay maduración ni transmisión de la fe sin un claro testimonio de la misma en la vida diaria, se esfuerza en progresar en ella con su ejemplaridad de vida y vivencia cristiana.

Constante actualización profesional

56.- Reconocemos que el ejercicio responsable de nuestra actividad educadora exige una adecuada preparación profesional y la incesante renovación del profesorado para el dominio de los mejores métodos educativos. La calidad de enseñanza nos estimula a una constante actualización.

Selección del profesorado

57.- En la selección de los docentes de este Colegio se habrá de tener en cuenta Nuestro Ideario Educativo, definido en este documento.



Derecho a elegir el tipo de educación

58.- La educación de los hijos es responsabilidad y deber primordial de los padres. Tienen, por tanto, derecho inalienable a elegir el tipo de educación y el Colegio que estimen más conveniente para ellos.

Contacto con los padres de los alumnos

59.- Para la acción educativa del Colegio es necesario un profundo y permanente contacto con los padres de los alumnos. Por ello procuramos siempre establecer, mantener y potenciar esa comunicación.

Participar en la realización del Proyecto Educativo

60.- Es indispensable la presencia de los padres y su participación activa y responsable en la vida del Colegio y en la realización del Proyecto Educativo, a través de sus representantes en los órganos correspondientes al Colegio.

Fomentar la colaboración

61.- Los padres deben ver en la Escuela una colaboradora y no una sustituta de su misión, que den a los maestros de sus hijos todo el apoyo que éstos necesiten, y que complementen su labor dando a sus hijos esa parte fundamental de la educación que ninguna escuela, por buena que sea, alcanza a dar.

62.- Deseamos y fomentamos la colaboración de padres, con suficiente preparación, en todo tipo de actividades educativas, pastorales, especialmente a través de la Asociación de Padres.

Ofrecerles ayuda en la educación y en la fe

63.- Este Colegio considera deber suyo ofrecer a los padres la ayuda necesaria para que puedan realizar cada vez mejor su propia tarea educadora en el seno de la familia, y también para su propio crecimiento en la fe con la oración y catequesis.



Principales protagonistas

64.- Los alumnos son los principales protagonistas de su formación y la razón de ser de la Comunidad Educativa. Intervienen activamente en la vida del Colegio según las exigencias propias de su edad, y asumen responsabilidades proporcionadas a su capacidad.

Su participación es un estímulo

65.- Consideramos positivo y fomentamos el asociacionismo de los alumnos y su participación en movimientos juveniles.

Asociación de Ex alumnos

66.- Nuestro Colegio está abierto a las sugerencias, peticiones e iniciativas de los alumnos; las agradece y animan a sus autoridades a su constante rejuvenecimiento y puesta al día.

67.- Esperamos que esta etapa de su formación les ayude en su vida y decisiones futuras, y les invitamos a mantener una posterior vinculación con el Colegio a través de la Asociación de Ex alumnos.



Corresponsables de la acción educativa

68.- Forman parte de la Comunidad Educativa desde lugares y responsabilidades diversas, y se corresponsabilizan de la acción educativa global. Comparten todo lo que la escuela es y ofrece.



Participación responsable

69.- Procuramos que la participación responsable y activa de todos en la vida del Colegio nos ayude a construir una verdadera Comunidad Educativa y a realizar el Proyecto Educativo.

Reglamento de Régimen Interior

70.- El Colegio tiene un Reglamento de Régimen Interior que determina las funciones, regula la marcha del mismo, y garantiza la adecuada coordinación de todas las personas y estamentos que intervienen en la acción educativa.

Consejo Escolar

71.- Entre otros órganos de gobierno señalados en el Reglamento de Régimen Interno destaca el Consejo Escolar del Colegio. El buen funcionamiento del Colegio es fruto de la competencia, la disponibilidad, la coherencia y la capacidad de compromiso de todos y cada uno de sus miembros y órganos.


Documentación


Los documentos consultados básicamente para la redacción de Nuestro Ideario Educativo son los siguientes:


El Instituto de las Hermanas Terciarias Franciscanas de la Caridad, fiel al espíritu de la Iglesia y de San Francisco de Asís, sabe que su trabajo educativo contribuye a realizar en el mundo la obra de Dios, trasmitiendo la Paz y el bien.


Que todo sea para gloria de Dios y salvación de las almas.


San Francisco de Asís